El niñ@ a los 7 meses es capaz de buscar con la mirada la procedencia de un sonido. Además utiliza el balbuceo para llamar la atención del adulto.
Alrededor de los 8 y 9 meses, emite sonidos silábicos en cadena (papa, tata,...). Es capaz de responder a su propio nombre.A partir de los 10 meses:
Suele comprender la prohibición "NO".
Busca objetos sencillos cuando se le indica.
Responde a órdenes como: dame, ven, di, adiós, etc.
Expresa sus deseos con gestos.
A los 12 meses empieza a decir alguna palabra con significado referencial (agua, pan, nene, papá, mamá, ...). Además es capaz de imitar sonidos de algunos animales.
Criterios de Estimulación
La interacción entre el adulto y el niñ@ es lo que va a crear en éste el deseo por comunicarse. Lenguaje y emoción están muy unidos. Dar afecto al niñ@ favorece el desarrollo del lenguaje.
En esta etapa del desarrollo, aunque el niñ@ no habla aún, si es capaz de comprender la entonación, los gestos, las miradas, así como ejercitar todos los mecanismos para la articulación de sonidos. Las condiciones idóneas para una adecuada estimulación del lenguaje, han de tener en cuenta, aspectos como:
Establecer un contacto visual.
Responder siempre a sus llamadas, de forma que el niñ@ perciba que le escuchas, aunque no se le pueda atender de inmediato.
Imitar los balbuceos que realiza el niñ@, convirtiendo la situación en un juego para los dos.
Háblale con ritmo, repitiendo sonido fáciles, con entonación atractiva y afectuosa. Hablándole siempre de forma correcta.
Cuando diga algo que se parece a una palabra, pronúnciala tú correctamente y demuestra que te gusta y que la has entendido, así volverá a intentar repetirla.
Cantar canciones sencillas con gestos (palmas, lobitos, pon-pon, etc...).
Muy buen aporte. El adecuado crecimiento de recién nacidos y niños es una prioridad del sistema sanitario. Por tal motivo, esta área ofrece muchas oportunidades a profesionales altamente capacitados.
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